Sigues paso a paso todas las fases de la cata:
Observas el color, hueles, saboreas, comentas…
Y sin embargo, a veces la magia no ocurre.
El vino parece cerrado, desequilibrado o, simplemente, decepcionante.
¿Y si el problema no fuera el vino… sino tu manera de catarlo?
En este artículo, te detallo 5 errores muy comunes que veo cometer tanto a aficionados como a entusiastas del vino.
Errores que distorsionan la percepción y empobrecen la experiencia sensorial.
Pero, ante todo, son errores fáciles de corregir, si comprendes cómo actúan.
1. No respetar la temperatura de servicio
La temperatura de servicio es un parámetro fundamental para que un vino se exprese correctamente..
Afecta directamente:
- la volatilidad de los aromas,
- y la percepción táctil y gustativa en boca.
Un vino blanco servido demasiado frío (por debajo de 8 °C) bloquea la expresión aromática:: el frío impide la liberación de los ésteres frutales y los terpenos
Un vino tinto demasiado caliente (más de 20 °C) acentúa el alcohol, enmascara los aromas finos y rompe el equilibrio.
En boca:
- El frío acentúa la acidez y endurece los taninos
- El calor da una sensación flácida y sin frescura
La temperatura actúa como un modulador sensorial.
Debe adaptarse a la estructura del vino, a su perfil aromático, a su nivel de taninos y a su dulzor residual.
2. Llenar la copa hasta el borde
Una copa de cata no es un simple recipiente.
Es una herramienta de precisión, diseñada para concentrar y canalizar los aromas.
Si se llena en exceso:
- se reduce la superficie de contacto entre el vino y el aire
- la oxigenación natural queda limitada
- y se hace difícil girar el vino sin derramarlo
El resultado: los compuestos volátiles no se elevan bien en la zona aromática de concentración.
Se pierde definición, complejidad y se dificulta el análisis sensorial.
Llenar un tercio de la copa es la regla de oro para una cata profesional.
3. Beber demasiado rápido
La cata requiere tiempo y atención.
Cada fase sensorial merece ser explorada con calma:
️ Observación visual
Primera nariz sin agitar la copa, luego tras agitarla
En boca: ataque, desarrollo, final
Beber rápido supone:
- saltarse esas fases esenciales
- saturar los receptores sensoriales
- no dar tiempo al cerebro para procesar la información
Haz pausas.
Vuelve varias veces al mismo vino.
La cata es un diálogo, no una carrera.
4. Subestimar el efecto del contexto
El lugar, la luz, el sonido, la temperatura, la atmósfera…
Todos estos elementos influyen —que seamos conscientes de ello— en edmodo en que percibimos un vino.
La neuroenología lo demuestra:
Una música suave hace que el vino parezca más redondo
Una luz blanca aumenta la percepción de acidez
Un vaso coloreado puede alterar la percepción visual del vino
Son los llamados efectos contextuales o sesgos cognitivos.
Para una cata fiable:
Crea un entorno neutro → luz blanca, sin olores extraños, silencio o sonido controlado, u una temperatura estable.
Pero cuidado:
✨ El vino también es emoción.
Y el contexto puede enriquecer la experiencia, si lo elegimos conscientemente.
5. Guardar el vino abierto demasiado tiempo
Una vez abierta la botella, se ponen en marcha dos procesos:
- Oxidación química: el oxígeno transforma los compuestos fenólicos lo que da lugar a → oscurecimiento, pérdida de frescura, aparición de aromas de nuez o manzana pasada
- Proliferación microbiana: levaduras oxidativas, acetobacterias… sobre todo a temperatura ambiente
Incluso con una buena conservación, el vino comienza a alterarse tras 24-48 horas.
Para preservar el vino:
- guárdalo a 4-6 °C
- usa un gas inerte (argón, CO₂)
- o un sistema de vacío parcial
Conclusión: 5 gestos simples para una cata más viva
Ya lo has visto:
Son errores sencillos, pero muy dañinos para una cata de calidad.
Evitar estos errores es un paso hacia una degustación más consciente, precisa y enriquecedora.
✅ Respeta la temperatura de servicio
✅ Deja espacio en la copa
✅ Tómate tu tiempo
✅ Cuida el entorno
✅ Protege el vino una vez abierto
Pequeños gestos, accesibles a todos, que pueden transformar tu forma de catar.
Y tú, ¿qué error solías cometer… sin darte cuenta?
✨ Porque el vino no es solo una bebida.
Es una voz.
La voz de la tierra, del suelo, el clima, el tiempo…
yla de quien sabe detenerse a escucharla.